Ha pasado una semana desde que mi nuera se fue de viaje de negocios. Una suegra lujuriosa acude a Daisuke, quien tiene problemas para hacer las tareas del hogar. Los pechos con su peso sobresaliente vibrando cada vez que se mueven son irresistibles. Daisuke, que quería masajear sus regordetes pechos, de alguna manera filmó en secreto a su suegra duchándose, pero fue sorprendido con las manos en la masa en el último minuto. Sin embargo, en lugar de enfadarme, mi suegra me sedujo con la masturbación.